Sueños de una noche de verano: Benicàssim

Empiezo a escribir las primeras ideas de esta serie de artículos en pleno mes de febrero, y sintiendo una especial nostalgia por el verano, su luz, su calor, su color y en especial, sus aromas a sal y a mar...

Y es que yo soy más de verano que de invierno, y también más de mar que de montaña... Siempre he pensado que eso de: "es que yo nací en el Mediterráneo...", me ha marcado mucho, y no puedo pasar mucho tiempo alejada de ese mar... Esa nostalgia la experimenté cuando estudiaba en Zaragoza, o más tarde, cuando trabajaba en una comarca del interior de Valencia, mal llamada "La Costera", porque es bastante de interior...

El verano siempre me ha traído bonitos recuerdos: mis primeros años de vida y las vacaciones en la costa gallega, mi adolescencia y juventud y las vacaciones en Benicàssim, y desde hace algunos años, mis veranos en la Costa Brava, y mis mini vacaciones en Formentera...

Imágenes de playas: arriba playas de S'Agaró (Costa Brava) y Benicàssim; abajo playas de Formentera.

Cada lugar de los que he nombrado tiene su encanto especial, y si me diesen a elegir, me quedaría con todos ellos, cada uno para una ocasión: la costa gallega para vacaciones en familia, Benicàssim para ir con amigos, Formentera para desconexión y vacaciones en pareja, y la Costa Brava, para una mezcla de todas ellas...

En estos artículos os quiero acercar un poco a los lugares de mis "sueños de noches de verano", y, como no, empiezo por Benicàssim, un lugar donde he pasado los mejores veranos de mi vida, aquellos en los que tenía las vacaciones más largas y los veranos más relajados y divertidos, aquellos en los que los días pasaban entre piscina, playa, siesta, paseos por el Eurosol o Torreón, y noches de bares en la mítica plaza els Dolors del pueblo de Benicàssim, y por supuesto, en su discoteca al aire libre K'sim. 

Imágenes de Benicàssim

Imágenes de Eurosol, Torreón y Villa María (playas de Benicàssim)

Imágenes de la Plaça els Dolors de Benicàssim

Imágenes de la discoteca K'sim
 

De aquellos años conservo muchos recuerdos, y también muchas personas en mi memoria, gente de otras partes de España, como Arancha o Isabel, de otras partes del mundo, como Uwe y Berni, y a algunas de mis mejores amigas, como Carmen y Laura. También tengo muchos recuerdos de los ratos pasados con mi hermana Sonia, de hacerle un poco de mami cuando mis padres se iban a trabajar por la mañana,  y me dejaban de "ama de casa" en nuestro apartamento hasta su vuelta por la noche. Durante esos veranos también aprendí a cocinar, me enamoré por primera vez, me dieron mi primer beso, practiqué inglés, y me hice conductora experta de mi Panda amarillo...

Aún hoy, me gusta ir a Benicàssim siempre que puedo, a dar una vuelta y cenar con mi familia, a tomar unas tapitas en lugares como Vin Up o Jota's, acompañada de amigas como Inma, o recordando viejos tiempos con Carmen y Laura en algunos de los Pubs más emblemáticos del pueblo:

Con mi hermana Sonia y mi sobrina Paula

Imágenes de los restaurantes Vin Up y Jota's (Benicàssim pueblo)

En una de estas cenas con mis amigas, el verano pasado, nos llenamos de recuerdos y tomamos unas cuantas fotos de esos lugares, que os muestro aquí:

Algunos bares de copas del pueblo de Benicàssim

Y también ahora, cada verano me gusta ir algún día a sus playas, para recordar esa arena fina, tan suave, y que tanto echo de menos viviendo en la Costa Brava... Y recordar también sus aguas cálidas, donde darte un baño a primera hora de la mañana no da pereza, y donde tienes que darte una buena caminata en el mar para conseguir que el agua te cubra...

 

Playas de Benicàssim

Todo eso y mucho más es Benicàssim para mí...

Antes de acabar, y para los que no lo conozcáis, una recomendación: si podéis, id a visitar Benicàssim, no os defraudará... y si váis a Benicàssim, no dejéis de comer una buena paella valenciana (en Castellón también las hacemos muy bien), en algún restaurante de la zona, y una leche merengada en una buena heladería, como Los Jijonencos:

Paella valenciana. Imágenes de Los Jijonencos en Benicàssim y su leche merengada.

Y ahora sí, me despido hasta pronto con más "sueños de mis noches de verano"...